Modelo de Explotación Sostenible
Fundación La Contienda Dehesa Sostenible tiene como principal finalidad configurarse como un Centro de Interpretación del cerdo ibérico de referencia en el ámbito nacional e internacional.
En aras a la consecución de este objetivo la finca tiene como principal actividad económica la producción del cerdo ibérico en el entorno de la dehesa, mediante un proyecto innovador de explotación sostenible que proporciona una materia prima de excelente calidad para la elaboración de jamones y otros productos derivados, preservando el medio natural.
Así, se ha implantado un modelo técnicamente apropiado, económicamente viable y socialmente aceptable. Un modelo de explotación que permite acometer el desarrollo práctico de nuevas tecnologías en producción del cerdo ibérico para mejorar la rentabilidad productiva y mantener la competitividad a través de la implantación de un modelo productivo basado en el bienestar animal, la protección ambiental y la seguridad alimentaria.
Todo ello, además, considerando planteamientos que sirven como base para mantener una relación directa y cercana con todos los sectores implicados en la producción, transformación y comercialización, atrayendo científicos e investigadores de reconocido prestigio y escuchando las inquietudes del sector del cerdo ibérico.
Una explotación de estas características es el escenario didáctico más apropiado para el aprendizaje práctico de todos los contenidos que incluyen el sistema productivo de cerdo ibérico, al tratarse de una explotación porcina en actividad que incorpora una amplitud de contenidos en formación, investigación y divulgación.
Medio Ambiente
El proyecto de Fundación La Contienda Dehesa Sostenible, ha permitido implantar un sistema productivo rentable y sostenible, que sirve de referencia para garantizar la conservación de los recursos de la tierra – agua, flora y fauna salvaje – y no degradar el medio ambiente.
El compromiso con el medio ambiente se refleja, además, en la conservación y recuperación de la fauna salvaje (principalmente buitres) y la reintroducción de especies en peligro de extinción (como el águila imperial), así como en la conservación de la dehesa tradicional mediante la regeneración herbácea y forestal, especialmente ejemplares de alcornoques y encinas.